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martes, 26 de noviembre de 2019

Nightstalker : la áspera leyenda europea


Cuando se habla de Nightstalker se hace sobre una verdadera leyenda en Grecia. Con el resurgimiento del stoner como género en lo que va del siglo XXI, varias bandas helénicas se han sumado a los sonidos distorsionados hasta alcanzar un nombre en la escena europea como 1000mods y Godsleep; pero el grupo ateniense es el referente obligado cuando se habla de música fuerte en dicha zona del mundo. Sin embargo, es necesario dejar claro que a los integrantes de la agrupación jamás les han agradado las etiquetas y éso queda claramente plasmado en sus ochos producciones discográficas; así que más allá del grunge, stoner y heavy metal, Nightstalker es puro y simple rock.

Desde que la banda de Atenas presentó el Dead rock commandos en 2012, Nightstalker ha mantenido una estable alineación con la que ha fundamentado un estilo propio inspirado en el hard rock del eterno Black Sabbath, en la violencia e intensidad sonora de Mötorhead, en los sonidos crudos y alternativos de Monster Magnet y en las armonías arenosas de Kyuss; creando así una amalgama única que le dota a la banda una identidad inconfundible al grado de convertirse al mismo tiempo en una influencia para el rock áspero de toda Europa.


As above, so below de octubre de 2016 fue el álbum que terminó por colocar a Nightstalker dentro del escenario mundial gracias al auge de la escena griega, de la cual siempre se ha desmarcado la banda.Más allá de etiquetas y regionalismos, el cuarteto mantuvo su trabajo sonoro que terminó siendo firmado por la reconocida disquera Heavy Psych Sounds que dirige el guitarrista de Black Rainbows, Gabriele Fiori. De esta manera, nos ha llegado a los tímpanos a partir de octubre de 2019 su Great hallucinations, el octavo álbum de la banda que requiere su escucha obligatoria para todo aquel amante de los densos sonidos del rock.

Siendo fieles a sus preceptos, Nightstalker ha construido un versátil álbum que toma como base los ásperos sonidos para crear una colección de temas con diversas atmósferas que jamás escapan del estilo propio de la agrupación. Simplemente, Great hallucinations es una granada de fragmentación que requiere ser digerida poco a poco para sacarle el mayor jugo posible, una tormenta eléctrica que descarga su furia sin control, una muestra de lo que una banda puede hacer más allá de clichés y prejuicios.


Great hallucinations es un disco sin contemplaciones que de principio a fin nos golpea con sus azotes sonoros llenos de distorsión y figuras llenas de imaginación que logran jugar con la intensidad. En un primer momento nos enfrentamos contra "Black cloud", tema saturado que cimbra los cimientos con su vigor mientras nos rodea con el zumbido surgido de sus amplificadores. Bajo el  mismo tenor, la fuerza del fuzz queda demostrada en "Cursed" con aquel maravilloso solo en manos de Tolis Motsios, aunque lo que más nos sorprenda sea la línea melódica construida por las vocales de Argy con ese color que recuerda al Ozzy Osbourne de su etapa solista.

Sin embargo, el último álbum del cuarteto de Atenas se permite crear temas con diversos cambios de ritmo que logran despertar el interés de quien ha escuchado su propuesta durante tantos años. "Seven out of Ten" alterna la pasividad de sus estrofas frente a la potencia de su estribillo mientras su instrumentación sube y baja de volumen, aunque la banda logra el extremo de esta intención gracias a la magia mística de "Hole in the mirror" con aquellas increíbles figuras de bajo en manos de Andreas Lagios que no para ni por un segundo. Asimismo, "Sad side of the city" nos ofrece una melodía más cercana al rock alternativo donde destaca las posibilidades vocales de Argy con su insistente I need your love mientras la incansable batería de Dinos Roulos nos marca los fuertes cambios de tiempo.


Y si aún nos queda alguna duda de todo el potencial que tiene Great hallucinations para convertirse en uno de los mejores materiales de Nightstalker, el álbum nos ofrece temas rabiosos como tormentas de arena como "Half crazy" que se acercan peligrosamente a lo que muchos conciben como stoner, pero que al final termina siendo una poderosa melodía construida a partir de un muro de sonido impenetrable que reta a más de uno para que lo intente cruzar. Finalmente tenemos al tema que da nombre al disco, un track de inicio terso y hasta quizá lisérgico que al transcurrir los segundos se transforma en una melodía hipnótica ahogada en wah que simplemente provoca que los pies despeguen del suelo sin retorno posible mientras ofrece un terreno fértil para la improvisación de las cósmicas guitarras y el reptante bajo eléctrico.


"No trates de volver a mí, estoy muy lejos.
Manteniendo lo mejor de mí, de todos modos me falta algo todavía.

Todo el tiempo aquí y allá, pero jamás a tiempo.
y  a pesar de lo que le pasó a mi cabeza, aun sigo perdiendo mi mente.

No puedo dormir en la noche
El aire es tan espeso que puedes cortarlo con un cuchillo
No puedo dormir en la noche
El dolor es tan profundo como si me cortaras con un cuchillo 
No puedo dormir en la noche
Mi dolor es tan dulce como si me cortaras con un cuchillo

Y estoy pensando, sí, estoy pensando 
¿Qué demonios es lo que me pasa?
Y me estoy hundiendo, me estoy hundiendo
así que ven y toma lo que queda de mí 
ven y toma lo que queda de mí..."

Por si fuera poco todo lo que contiene en su interior el Great hallucinations, Nightstalker escogió como single promocional el tema que podría ser el más experimental de los ocho tracks que lo conforman. "Sweet knife" tiene una melodía basada en un melancólico blues electrificado que con sus suaves acordes iniciales abren la herida para que con la sangre que fluya de ella puedan escapar las dolencias de una alma atormentada. Obviamente los griegos no podrían quedarse con aquella atmósfera deprimente, por lo que se permiten explotar con toda su capacidad de ruido y estruendo en un tormentoso estribillo lleno de insomnio y desgarre desbocado. Mientras observamos a una despechada seguidora de la banda en un intento por escapar de sus propios demonios a través del trabajo visual realizado por Aggelos Vinieratos, "Sweet knife" es expulsada por las bocinas con toda su desesperación contenida a punto de rabia y arrebato.


Si lugar a dudas, el retorno de Nightstalker es triunfal gracias al excelente trabajo logrado en sus más de 40 minutos de rock sincero que, a pesar de buscar romper con los estereotipos, termina por confesar algunas tendencias sonoras que más de uno logrará detectar y disfrutar. Great hallucinations es un  manto de niebla espesa que con su aspereza cubre todo el panorama acústico a nuestro alrededor, pero más allá del simple ruido envolvente, la banda nacida en Grecia sabe equilibrar el ritmo y el sonido para crear ocho temas concretos en su individualidad que al mismo tiempo en su conjunto funcionan como una unidad igual de alucinante que la portada creada por Jon Toussas. Mientras las ensoñaciones lisérgicas se mezclan con el estruendo eléctrico de Nightstalker, nosotros tenemos la oportunidad de disfrutar de uno de los materiales discográficos más completos que han logrado en este 2019 alcanzar el equilibrio sonoro y la calidad interpretativa en una obra potente con un excelente trabajo de producción técnica...


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